El sábado 16 de septiembre de 2023, a las 10 am, aterrizamos en Windhoek bajo un cielo azul. También aquí, como en Doha, salimos del avión por las escaleras. (Lo entiendo en Windhoek; ¡pero el hecho de que tengas que subir un tramo de escaleras para salir del avión en Doha me sorprendió mucho!)

Como tenemos la Residencia Permanente de Namibia desde hace muchos años, pudimos evitar la larga cola de turistas. Pronto nos encontramos frente a la pequeña cabaña donde una amigable mujer namibia estaba sentada y tomando nuestros pasaportes. Nos saludó con un amistoso «¡Bienvenidos a casa!». Difícilmente puede recibir una bienvenida mejor en un aeropuerto.

Ahora nos quedaba por delante el último tramo de este vuelo. Fue un viaje de cuatro horas en un gran autobús Toyota que nos llevó de Windhoek a Swakopmund, adonde llegamos a las cinco de la tarde. 28 horas después de salir de Zúrich, estábamos ante la puerta de nuestra casa en el campo de golf de Rossmund.

Detrás de nosotros quedó un agradable vuelo nocturno de larga distancia con Qatar Airways y un viaje en autobús a la costa de Namibia. Y frente a nosotros dos copas de vino espumoso con las que brindamos por nuestro segundo hogar.

PS. Si quieres saber más sobre Swakopmund y su historia, lee aquí.