Éramos muy escépticos sobre qué esperar en casa en tiempos de Covid 19. Otros viajeros que volaron a casa nos habían advertido que serían recibidos con un «saludo con el codo» y una máscara. Y también se debían respetar meticulosas reglas de distancia. (¿Nos preguntamos cómo hacer un abrazo así?)

Experimentamos la primera sorpresa positiva en el aeropuerto cuando fuimos recibidos por amigos con una máscara* pero con los brazos abiertos y un abrazo.

La segunda y también positiva sorpresa siguió en un restaurante, donde unos amigos nos invitaron a almorzar. Al entrar, nos dijeron que no teníamos que usar máscara. Después de completar la lista de invitados, nos llevaron a la mesa donde nuestros amigos ya estaban sentados. Traudel extendió los codos para saludarnos (pero solo por diversión) y luego nos dio un fuerte abrazo como debe ser para los austriacos. Lo mismo pasó con Gerhard. ¡Gracias, queridos amigos, por recibirnos de esta manera!

* ¡El uso de la máscara era obligatorio en el edificio del aeropuerto! Solo nos reconocimos realmente cuando pudimos sacarlos en el auto – ¡sonríe!